El Agua. El bien tan preciado.

Todos sabemos que sin agua no hay vida. Cada vez es más habituar tener dificultades relacionadas con el agua en nuestra localidad y parece extraño ya que en una zona tan lluviosa donde caía nieve en abundancia, que empecemos a tener estos problemas no es muy normal, pero es la realidad. En muchas ocasiones escuchamos a los mayores los nevazos que caían ,"uno sobre otro" "nos pasábamos 2 y 3 meses sin poder ir al campo por el tiempo" "el muñeco de nieve de la Plaza Iglesia duraba un montón de tiempo". Los mas jóvenes hemos conocido las nieves perpetuas en nuestras queridas montañas, cosa que actualmente cada vez es más raro.
Es un poco como el cuento del lobo, que viene, que viene, pero ya está aquí. Ojala no, pero lo peor puede estar por llegar, restricciones de agua, dificultades para regar nuestras fincas....y ante esta situación hay que reconocer que los políticos son los que tienen que tomar y adoptar las grandes soluciones en esas "cumbres del cambio climático".
Pero nosotros también podemos hacer cosas, como no. Modificar nuestros hábitos de consumo que en algunas ocasiones son derrochadores(cerrar los grifos cuando nos estamos jabonando en la ducha, cuando fregamos.....).
Nuestro centro (que tiene una vida de casi 30 años), cuando se construyo no tenían esas preocupaciones sobre el agua y por lo tanto no se planteaban cisternas con doble carga y todo eso. Nosotros hemos metido botellas de agua en nuestras cisternas para ahorrar agua. ¿Cuantos litros podemos ahorrar en un año en nuestro centro si cada vez que tiramos de las cisternas gastamos 2 litros menos?.